Actuación: Reforma parcial, amueblamiento y decoración
Tipología: Piso / apartamento
Ubicación: La Roqueta (Valencia)
Superficie: 85m2
Cliente: Segunda vivienda para pareja
PLANTEAMIENTO:
Partimos de un antiguo piso exterior, con mucha luz pero muy compartimentado y totalmente a reformar.
Los clientes, una pareja residente en Madrid que deseaba utilizar el piso como segunda vivienda (períodos de teletrabajo, vacaciones, etc.) deseaban dos dormitorios generosos y dos baños, uno de ellos en suite, así como un pequeño estudio y un espacio comedor-salón-cocina todo en uno.
El objetivo era reformarlo totalmente y hacer de él un espacio agradable de estilo mediterráneo acorde con su ubicación en ciudad costera, recuperando y renovando cuando fuese necesario los elementos estructurales.
SOLUCIÓN:
Por un lado hubo que realizar varias soluciones de tipo técnico, fundamentalmente en lo referente a la restauración y limpieza de vigas y viguetas, inclusión de una fuerte viga de hierro central para sostener y proteger la estructura de la cubierta superior y la colocación de un suelo flotante para proteger el mosaico inferior en mal estado por requerimientos de Patrimonio.
Por otro lado se realizó un cambio total de distribución, llevando la cocina y el comedor antiguos hacia la zona exterior, situándolos junto a la zona de estar para ubicarlos en la zona noble de la casa.
Para la cocina, se optó por un solo lineal con frente de cocción en azulejo destonificado de estética semirústica y puertas lacadas blancas como contraste, remarcadas con un pequeño borde alrededor y ocultando todos los electrodomésticos. Para la encimera, un porcelánico de la marca Inalco de estética fina y tonos crudos.
En el comedor se optó por mesa y sillas de madera acompañadas por dos lámparas de mimbre, y para la zona de estar, un sofá en tela rústica de color crudo y una mecedora de apoyo, con mesa de centro y mesita auxiliar de madera y pequeño mueble TV en blanco acompañador de baldas con plantas.
En la misma zona exterior se aprovechó el espacio en el extremo para levantar un pequeño despacho semiabierto al salón (con posibilidad de cerrarlo con puertas correderas por el interior en caso de ser necesario) para darle una ligera intimidad pero aprovechando al máximo la luz y el espacio de la estancia anexa.
También se decoró la zona anexa a la puerta de entrada para generar una sensación de acogida, optando por un banco de madera con colgadores de pared y varios elementos decorativos, como cojines, mantas y una iluminación a base de puntos led.
Para las llaves, se optó por colocar al otro lado un pedestal de madera aprovechando el hueco que dejaba el pilar antes de pasar al pasillo.
La puerta de entrada se mantuvo en su estética original, mejorándola con barnices y colocando un cierre en color negro acorde con el estilo.
En el ala posterior, separado por un pequeño pasillo distribuidor en el que se construyó un hueco para alojar un pequeño espacio para abrigos y esconder el cuadro eléctrico, se ubicó la zona de noche, colocando los dos grandes dormitorios enfrentados por sendas puertas dobles recuperadas de la vivienda original y sustituyendo los cristales esmerilados por espejos para poder hacer opacos los dormitorios a la hora de dormir sin perder la estética de cuarterones tan propia de las puertas antiguas.
En el dormitorio principal, decorado en tonos blush y rosa palo, se ubicó también el baño en suite, adecuado para dos personas y decorado en tonos salmón en combinación con azulejo de estética hidráulica y con el arco de medio punto como base decorativa, tanto en los espejos como en la entrada a la ducha y los elementos decorativos. Por su parte, se utilizaron dos puertas recuperadas para crear una doble puerta corredera de estética granero, con riel y tirador negro, tono a juego con los de las demás puertas.
Por su parte, en la cama, se construyó un falso cabecero de obra revestido de papel pintado y balda de madera para poder pasar las tuberías hacia la cocina, que sirvió también de apoyo estético al conjunto, al tener que colocar la cama bajo la ventana, haciendo de este cabecero el divisor principal entre ambas.
El conjunto se completó con una cómoda, un gran cesto para guardar los cojines decorativos por la noche, una silla de apoyo con balda decorativa y dos mesillas circulares de madera, acompañando a un gran armario que no se llevó a techo para evitar el corte en la continuidad de las vigas y aprovechando ese espacio superior para colocar una tira de luz indirecta.
El dormitorio de invitados se vistió con una cama matrimonial y mesillas a cada lado, dos lámparas colgantes de mimbre, una cómoda de madera con planta decorativa, colgadores de pared y un gran armario con tiradores de cuero.
Junto a él, el baño común, en tonos menta combinados con azulejo de estética hidráulica, compuesto por un bloque para alojar la lavadora y el termo, un mueble lavabo, un
El resultado, un acogedor piso mediterráneo ideado para segunda vivienda pero con todas las comodidades de una vivienda habitual.