Actuación: Proyecto de interiorismo
Tipología: Hamburguesería
Ubicación: Madrid
Superficie: 166 m2
Cliente: Pareja empresarios
PLANTEAMIENTO:
Partíamos de un local alargado con entrada por ambos extremos y cuatro pilares a lo largo de todo el espacio. Las premisas de los clientes eran básicamente lograr crear una hamburguesería alegre y desenfadada sin dejar de lado el diseño, decantándose por un estilo pop refinado con cierto recuerdo a los años 70.
SOLUCIÓN:
Comenzamos distribuyendo el espacio ubicando la barra junto a la entrada principal y frente a ella una serie de mesas altas con taburetes para las consumiciones rápidas. A continuación, y entre los pilares, colocamos mesas fijas con bancos para grupos de cuatro comensales, todas ellas iluminadas con lámparas de techo cilíndricas.
Frente a este espacio colocamos una barra auxiliar con una galería de láminas y una zona de mesas para dos personas, enmarcadas en grupos de dos con molduras de esquinas redondeadas y lámparas de pared orientables.
Al final del local dejamos una zona chill-out con sillones y un sofá en L, además del acceso a la zona de baños, almacén y despacho.
En cuanto a la decoración, optamos por tonos morados que aplicamos en los pósters que visten varias de las paredes del local, en las lámparas de techo, en el canto de los botelleros y en el de las molduras que envuelven las mesas y de las franjas creadas tras los pilares. Para conservar la luminosidad y romper a un mismo tiempo la monotonía de las paredes lisas, empleamos un papel pintado en 3d con formas geométricas en color blanco.